
Los órganos endocrinos también pueden constituir el asiento de tumores malignos, que, en general tienden a mostrar un comportamiento menos agresivo y unas tas de c desarrollo y crecimiento menores que los cánceres del resto de órganos sólidos. Dado que se originan a partir de tipos celulares cuya función habitual es la secreción de hormonas, no es raro que a lo largo de su evolución se desarrollen síndromes de hipersecreción hormonal específicos para cada tipo de tumor.
La cirugía constituye la modalidad terapéutica esencial para estas lesiones, que muestran sensibilidades particulares (a menudo menores que otros tipos de cáncer) a la radioterapia y quimioterapia. Por el contrario, su origen en células secretoras de hormonas abre la puerta a otras modalidades terapéuticas que aprovechan la incorporación específica de susta